El puerto de Progreso, en Yucatán, es reconocido por su malecón, playas y cruceros. Pero hay un ícono que ha permanecido más tiempo que cualquier otro: el faro de Progreso.
El pasado 3 de mayo de 2025, la Secretaría de Marina (SEMAR) organizó una ceremonia para conmemorar el 132 aniversario de este increíble faro.
El evento se llevó a cabo con presencia de autoridades, marinos y representantes locales, recordando la importancia del faro en la identidad portuaria.
Estas conmemoraciones no solo reconocen el pasado, también proyectan el futuro. El faro se mantiene como un símbolo vivo de Progreso, en un contexto donde la historia se combina con el desarrollo urbano y turístico.
Además, estas fechas especiales son una oportunidad para involucrar a las nuevas generaciones, promoviendo la educación marítima y el orgullo local.
La construcción del faro fue una tarea monumental. Inició en 1873 y concluyó 20 años después, en 1893.
Su diseño, pensado para soportar condiciones costeras severas, muestra la importancia que tuvo desde sus orígenes como infraestructura clave para el desarrollo portuario.
Con una altura de 32 metros hasta la plataforma y 35 hasta el foco, el faro está construido con materiales resistentes a la corrosión marina.
Para llegar a lo alto, hay que subir 120 escalones en espiral y luego 7 peldaños verticales que dan acceso a la lámpara principal.
Según la Capitanía del Puerto de Progreso, el faro no ha tenido un solo día sin operar. La única interrupción registrada fue de cuatro horas, provocada por una falla técnica menor. Aun así, el faro logró reanudar su funcionamiento rápidamente.
Este nivel de continuidad lo convierte en uno de los faros más confiables de México. Además de su función para embarcaciones pesqueras, también actúa como respaldo para barcos comerciales, turísticos y de carga, especialmente en situaciones de poca visibilidad o emergencia.
El faro de Progreso continúa funcionando con un sistema óptico robusto. Tiene una óptica de 800 mm que emite ocho haces de luz, visibles hasta 20 millas náuticas (unos 40 kilómetros).
Uno de sus aspectos únicos es que su luz gira 360 grados, a pesar de que el puerto de Progreso no está en una isla.
Este diseño permite iluminar toda la periferia, lo que ha resultado útil para embarcaciones que navegan de día y de noche, desde diferentes ángulos de aproximación.
Este sistema no se ha modificado desde su instalación original, ya que sigue cumpliendo su propósito sin fallas significativas.
Más allá de su uso técnico, el faro de Progreso ha sido protagonista en momentos históricos importantes:
- Durante la Revolución Mexicana (1910-1920), sirvió como guía para embarcaciones que transportaban tropas y suministros. Fue clave para mantener conectadas las rutas costeras del Golfo de México.
- En la Segunda Guerra Mundial, el faro tuvo un papel estratégico como vigilante frente a amenazas submarinas. Su luz se convirtió en un punto de referencia para defender la costa yucateca frente a posibles ataques de submarinos enemigos.
Estas funciones históricas muestran cómo una estructura física puede convertirse en símbolo de seguridad nacional y resiliencia.
En los últimos años, Progreso ha recibido cada vez más visitantes gracias a su desarrollo turístico.
El malecón renovado, las playas accesibles y la llegada de cruceros han posicionado al puerto como uno de los destinos más visitados de Yucatán.
En este contexto, el faro representa una oportunidad para diversificar el turismo en Progreso.
Actualmente no está abierto al público de forma regular, pero su sola presencia y visibilidad lo convierten en un elemento fotogénico, cultural y educativo.
El faro es también un indicador de estabilidad para inversionistas. Por esta razón, empresas como Grupo ORVE apuestan por Progreso.
Proyectos como Ciudad Central Progreso, están diseñados para integrarse con el entorno y aprovechar las ventajas de un puerto en crecimiento constante.
Invertir en un lugar con historia, infraestructura en funcionamiento y turismo en alza, representa una decisión inteligente para quienes buscan seguridad a largo plazo.