Invertir en bienes raíces siempre ha sido una de las formas más seguras de hacer crecer el patrimonio. Sin embargo, con el auge de plataformas digitales como Airbnb, cada vez más personas se preguntan si realmente vale la pena comprar una propiedad para rentarla a corto plazo.
Aquí te contaremos, de manera sencilla y clara, cuáles son las ventajas, desventajas y puntos que debes considerar antes de dar este paso.
Cuando hablamos de invertir en Airbnb, nos referimos a comprar una casa, departamento o incluso un terreno con el fin de generar ingresos al ofrecer rentas de corta estancia a turistas o viajeros.
A diferencia de una renta fija tradicional, en la que un inquilino ocupa la propiedad durante meses o años, en Airbnb los huéspedes solo se quedan por noches o semanas. Esto puede significar más ingresos, pero también implica más movimiento, mantenimiento y administración.
El éxito de esta inversión depende de factores como la ubicación, la temporada, el tipo de propiedad y la demanda turística de la zona.
Invertir en una propiedad para Airbnb puede ser muy atractivo. Estas son algunas de las principales ventajas:
Un departamento en renta fija puede darte entre un 4% y 6% de retorno anual. En cambio, un inmueble bien ubicado en Airbnb puede alcanzar entre el 8% y 12% de retorno.
Por ejemplo, en Mérida, un departamento de 2 habitaciones cerca del centro histórico puede rentarse desde $1,200 hasta $2,500 MXN por noche en Airbnb. Si se logra una ocupación del 60% al 70% al mes, el ingreso supera fácilmente lo que generaría una renta fija mensual.
Al ser dueño, tú decides cuándo rentar y cuándo usar tu propiedad. Esto permite disfrutar de vacaciones propias o familiares sin perder el potencial de ingreso el resto del año.
Además de las rentas, la propiedad gana valor con el tiempo, ya que los bienes raíces en zonas turísticas o en expansión tienden a aumentar su precio año con año.
En Yucatán, la plusvalía en ciertas zonas supera el 10% anual, impulsada por turismo, seguridad y desarrollo económico.
Ciudades como Mérida, Progreso, Tulum y Playa del Carmen tienen alta demanda de hospedaje temporal. En plataformas como Airbnb, las propiedades con amenidades modernas y cercanas a playas o centros históricos destacan entre las más rentadas.
Aunque el modelo de negocio es atractivo, también existen algunos aspectos que conviene considerar para que tu inversión sea exitosa. No se trata de desventajas graves, sino de factores que requieren organización y previsión:
Comprar una propiedad pensada para Airbnb suele implicar destinar un enganche y un presupuesto para amueblarla y decorarla. Sin embargo, esta inversión se recupera más rápido gracias a los ingresos constantes que se pueden generar con la plataforma.
Al ser una renta de corta estancia, los huéspedes cambian con mayor frecuencia que en una renta tradicional. Esto significa organizar la limpieza y dar atención personalizada, lo cual puede resolverse fácilmente contratando un servicio de administración o incluso apoyándote con plataformas locales especializadas.
Como en cualquier negocio turístico, la demanda puede subir o bajar según la temporada. Por ejemplo, durante vacaciones de verano, Navidad o Semana Santa, la ocupación en Airbnb suele alcanzar niveles muy altos, lo que se traduce en mayores ingresos.
En cambio, en meses más tranquilos como septiembre o enero, puede que haya menos reservaciones.
Lejos de ser un problema, esta dinámica puede jugar a tu favor si sabes aprovecharla. Muchos anfitriones aplican estrategias de precios dinámicos, ofreciendo descuentos en temporada baja para mantener su propiedad ocupada.
Otros usan ese tiempo para realizar mejoras, renovar mobiliario o incluso disfrutar personalmente de la propiedad.
En zonas con turismo constante, como Mérida y Progreso, la ocupación se mantiene estable gran parte del año gracias a visitantes nacionales y extranjeros.
Esto hace que, aun con ligeras variaciones, la inversión en una propiedad para Airbnb conserve su atractivo y ofrezca ingresos sostenidos en el tiempo.
Algunas ciudades aplican ciertos requisitos o impuestos a las rentas temporales. Son trámites sencillos que, al cumplirlos, te darán mayor seguridad y confianza para operar tu propiedad sin inconvenientes.
Un aspecto clave es calcular el ROI (retorno de inversión). Si la propiedad genera más de lo que cuesta mantenerla y pagar el crédito, se considera rentable.
El sureste de México vive un auge inmobiliario. Factores como seguridad, conectividad y turismo han disparado el interés de inversionistas nacionales y extranjeros.
En Mérida, un departamento en el centro con valor de $2.8 MDP puede generar $35,000 a $50,000 MXN al mes en Airbnb con buena ocupación. Esto representa un ROI anual del 10% al 12%.
Comparado con una renta fija que daría $15,000 MXN al mes, la diferencia es clara.
Proyectos como Ukana Mérida y Xo´ok, desarrollados por Grupo ORVE, son un ejemplo de este potencial.
Ubicados en zonas con alta plusvalía y diseñados con amenidades ideales para viajeros, representan propiedades que pueden combinar rentabilidad de Airbnb con crecimiento patrimonial.
Invertir en un departamento pensado para Airbnb puede sonar complejo, pero con un cálculo sencillo se entiende por qué es una decisión tan atractiva.
Tomemos como ejemplo dos desarrollos de Grupo ORVE, diseñados con amenidades y ubicaciones ideales para este modelo.
Ukana Mérida ofrece departamentos en una zona cosmopolita con alberca y amenidades modernas, lo que los hace muy atractivos para turistas y profesionistas.
Si se rentan en Airbnb con una tarifa promedio de $1,600 por noche y una ocupación del 55% del mes (unas 16 noches), los ingresos aproximados serían:
Esto significa que, aun en un escenario conservador, la propiedad está generando ingresos muy superiores a una renta fija tradicional.
Además, al sumar la plusvalía que registra Mérida año tras año, la recuperación de la inversión es mucho más rápida y sólida
Xo´ok está pensado para quienes buscan experiencias de costa y turismo, un perfil muy demandado en Airbnb.
Con una tarifa de $2,800 por noche y la misma ocupación del 55% (unas 16 noches al mes), los resultados serían:
Este resultado muestra cómo una propiedad en Xo´ok puede convertirse en una auténtica máquina de ingresos.
Con menos de 3 millones de pesos de inversión, se logra una rentabilidad que supera ampliamente a otras opciones del mercado.
Y eso sin contar la plusvalía que aumenta cada año gracias al crecimiento turístico de Yucatán.
La respuesta es sí, vale la pena invertir en Airbnb, siempre y cuando se tomen en cuenta todos los factores: ubicación, demanda, administración y plusvalía.
El sureste de México vive un auge inmobiliario. Factores como seguridad, conectividad y turismo han disparado el interés de inversionistas nacionales y extranjeros.
En destinos como Yucatán, donde el turismo crece y los precios de la vivienda aún son accesibles, esta inversión puede convertirse en una de las mejores decisiones financieras a mediano y largo plazo.
Si estás pensando en dar el paso, proyectos de Grupo ORVE como Ukana Mérida y Xo´ok ofrecen la combinación ideal entre modernidad, amenidades, rentabilidad y plusvalía.
Invertir en un inmueble bien planeado no solo significa ingresos inmediatos en Airbnb, también asegura un patrimonio que crecerá con el tiempo.
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