Cómo las áreas recreativas están impulsando la plusvalía de las propiedades en Yucatán

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Cómo las áreas recreativas están impulsando la plusvalía de las propiedades en Yucatán

Cuando se trata de invertir en bienes raíces, una de las palabras que más se repite es “plusvalía”. Pero ¿qué significa realmente y por qué se dice que las áreas recreativas están ayudando a que muchas propiedades en Yucatán aumenten su valor con el tiempo? 

La plusvalía es el aumento del valor de un inmueble con el paso de los años. Este incremento puede deberse a muchos factores: la ubicación, la infraestructura que lo rodea, su accesibilidad, los servicios disponibles, y sí, también las áreas recreativas. 

 

Las áreas recreativas y su papel en el valor de las propiedades 

Imagina dos casas. Una está en una zona sin parques, sin árboles, sin lugares para caminar. La otra está frente a un parque, cerca de una ciclovía y con acceso fácil a centros comerciales y servicios médicos. ¿Cuál crees que vale más? 

La respuesta es sencilla: la segunda. Y no solo por comodidad o belleza. Diversos estudios y publicaciones lo confirman: las zonas con áreas recreativas bien planificadas incrementan el valor de las viviendas cercanas. 

Según el portal Propiedades en México, “la proximidad a parques, jardines y áreas recreativas aporta un valor añadido que no se puede subestimar”.  

Estas zonas hacen que vivir en un lugar sea más atractivo. La gente quiere espacios al aire libre, zonas para ejercitarse, convivir o simplemente relajarse. 

 

Ciudad Central Mérida: un ejemplo de cómo se construye plusvalía 

En Yucatán existen varios desarrollos que están aprovechando esta tendencia. Uno de los más representativos es Ciudad Central Mérida, un proyecto de Grupo ORVE. 

Este desarrollo no solo incluye viviendas. También cuenta con ciclovías, hospital, gasolinera, amplias zonas verdes, lago, parque central y espacios comerciales. Todo está planeado para que los residentes tengan lo que necesitan a pocos minutos de casa. 

La clave está en el diseño. Cuando un desarrollo está bien planificado, con servicios integrados y amenidades atractivas, no solo mejora la calidad de vida. También hace que el valor de cada propiedad aumente con el tiempo. 

Según Smart Investors, “la construcción de nuevas carreteras, centros comerciales, hospitales y parques siempre eleva el valor de una zona”. Y en Ciudad Central Mérida, todos estos elementos están presentes. 

 

Más que belleza: beneficios reales para las personas 

No se trata solo de que un parque se vea bonito. Las áreas recreativas tienen beneficios reales y medibles para quienes viven cerca. 

Por ejemplo: 

  • Mejor salud física: caminar, correr o andar en bicicleta en ciclovías o senderos naturales es más fácil cuando tienes esos espacios cerca. 
  • Salud mental: pasar tiempo al aire libre, en contacto con la naturaleza, ayuda a reducir el estrés. 
  • Convivencia: los parques y zonas verdes son puntos de encuentro, donde las familias y vecinos pueden convivir y crear comunidad. 
  • Seguridad: las zonas con más vida y personas activas tienden a ser más seguras. 
  • Atractivo para negocios: donde hay vida, hay mercado. Los comercios también se benefician de zonas recreativas activas. 

Todo esto se traduce en mayor demanda por vivir en esas zonas. Y mayor demanda significa mayor valor. 

 

La importancia de la ubicación y las amenidades 

La plusvalía de una propiedad depende en gran parte de su ubicación. Pero no solo hablamos de distancia al centro de la ciudad, sino de lo que tienes alrededor. 

La cercanía a servicios de comunicación, medios de transporte, zonas recreativas, centros comerciales y amenidades puede aumentar el valor de tu casa en el futuro”. 

Eso quiere decir que, si tu casa está en una zona donde puedes caminar al parque, ejercitarte en una ciclovía, ir a una cafetería o centro comercial cercano, entonces probablemente con el tiempo valdrá más. 

Las personas ya no solo buscan metros cuadrados. Quieren experiencias, estilo de vida, facilidad. Y las amenidades como albercas, gimnasios, lagos artificiales o incluso espacios para mascotas, se han vuelto elementos clave para tomar una decisión de compra. 

 

El impacto del golf en la plusvalía inmobiliaria 

Una de las áreas recreativas que más valor añade a los inmuebles son los campos de golf. Aunque no todos los compradores son golfistas, vivir cerca de uno puede marcar una gran diferencia en el precio de una casa. 

En México existen más de 220 campos de golf, y cada año se construyen al menos tres nuevos. De acuerdo con la Federación Mexicana de Golf, el 60% de estos campos están dentro de fraccionamientos residenciales y el 40% en desarrollos turísticos. 

El arquitecto Enrique Valenzuela explica que el valor promedio de una casa con vista a un campo de golf está entre 2,500 y 3,000 dólares por metro cuadrado. ¡Es una diferencia enorme comparado con zonas sin este tipo de amenidades! 

Y es que los campos de golf no solo son espacios para jugar. Son símbolos de estatus, exclusividad y calidad de vida.  

Además, sus áreas verdes bien mantenidas mejoran el paisaje, reducen la temperatura del entorno y aumentan la biodiversidad. 

 

Yucatán: un estado en crecimiento y con visión de futuro 

Todo esto se combina de manera perfecta en Yucatán. Este estado no solo es reconocido por su seguridad y belleza natural. También ha sabido combinar la tradición con la modernidad. 

En Mérida, por ejemplo, encontramos universidades, hospitales de alto nivel, centros comerciales modernos, museos y una vibrante vida cultural y nocturna. Esto ha hecho que más personas busquen mudarse al estado. 

 

¿Por qué invertir en propiedades con áreas recreativas? 

Al pensar en invertir en una propiedad, muchas personas se enfocan únicamente en el precio de compra o en el diseño de la casa. Pero hay un factor que puede marcar una gran diferencia en el valor de esa inversión a lo largo del tiempo: las áreas recreativas. 

Estas zonas —como parques, ciclovías, canchas, lagos o incluso campos de golf— no solo embellecen el entorno. También generan beneficios concretos tanto para quienes habitan la propiedad como para quienes buscan adquirirla en el futuro. 

Veamos a detalle por qué son una excelente decisión de inversión: 

 

  1. Incrementan el valor de reventa

Cuando una propiedad está cerca de espacios bien planeados para la recreación, como un parque o un lago artificial, se vuelve más atractiva para las familias, los adultos mayores y también para inversionistas. 

Una casa junto a un área recreativa tiene un entorno más agradable, vistas más bonitas y, en muchos casos, menos ruido urbano.  

Por ejemplo, los desarrollos que cuentan con un campo de golf pueden alcanzar precios de hasta 3,000 dólares por metro cuadrado. Esto representa una gran diferencia frente a propiedades sin amenidades similares. 

Y si decides venderla más adelante, probablemente recibirás una mejor oferta que por una casa que no tiene nada de eso alrededor. 

 

  1. Mejoran la calidad de vida

Más allá del dinero, vivir cerca de áreas recreativas es bueno para ti y tu familia. Estos espacios permiten que niños y adultos pasen tiempo al aire libre, hagan ejercicio, jueguen o simplemente se relajen bajo un árbol. 

Estar en contacto con la naturaleza o moverse en bicicleta mejora la salud física y mental. Disminuye el estrés, favorece el descanso y ayuda a mantener un estilo de vida más activo y saludable. 

Y todo eso tiene un impacto directo en cómo se percibe el lugar. Las personas prefieren vivir donde se sienten mejor. Por eso, los fraccionamientos que ofrecen espacios de esparcimiento son más valorados que aquellos que no los tienen. 

 

  1. Atraen a nuevos habitantes y negocios

Cuando una zona cuenta con parques, senderos o canchas deportivas, se vuelve más atractiva no solo para vivir, sino también para instalar negocios. 

Los comercios buscan ubicarse donde hay movimiento, familias, estudiantes, deportistas, paseadores de perros, etc. Las áreas recreativas generan esa vida cotidiana que dinamiza a toda una comunidad. 

Así, los nuevos habitantes impulsan la construcción de nuevas casas, escuelas, tiendas y servicios. Y todo eso hace que el valor de las propiedades suba con el tiempo. 

Este efecto es evidente en zonas como Ciudad Central Mérida, donde la planeación urbana ha incluido múltiples espacios recreativos y comerciales. Resultado: una comunidad que crece constantemente, en plusvalía y en calidad de vida. 

 

  1. Crean una experiencia integral

Hoy, las personas ya no buscan solo “un lugar donde dormir”. Quieren vivir experiencias. Buscan hogares donde puedan disfrutar del entorno, sentirse seguros y tener todo cerca. 

Las áreas recreativas son parte clave de esa experiencia. Permiten salir a caminar por las tardes, organizar un picnic, andar en bici con los hijos, ejercitarse por la mañana o simplemente sentarse en una banca a disfrutar del paisaje. 

Este tipo de estilo de vida no solo es más placentero, sino que también construye comunidad. Hace que los vecinos se conozcan, que las familias compartan momentos y que todos se sientan más conectados con su espacio. 

Esa calidad de vida se refleja directamente en el valor del inmueble. Porque cuando una zona es agradable y funcional, todos quieren vivir ahí. Y eso mantiene la demanda —y el precio— en constante crecimiento. 

 

Áreas recreativas, una inversión inteligente 

Grupo ORVE ha desarrollado proyectos visionarios que integran áreas recreativas y amenidades de alto nivel para garantizar una vida cómoda y con alta plusvalía.  

En Ciudad Central Mérida, por ejemplo, se incluyen más de 500 hectáreas con ciclovías, lago, parque central de 40 hectáreas, hospital, club deportivo, y zona comercial.  

Por su parte, Ciudad Central Progreso ofrece 14 privadas con más de 85 amenidades, incluyendo Casa Club, anfiteatro, lago, muelle, zona arqueológica y más de 150,000 m² de áreas verdes.  

Y en el desarrollo vertical Xo´ok, se fusiona la modernidad con la comodidad en un edificio con alberca, coworking, gimnasio, área de juegos y terrazas, todo en una ubicación privilegiada de Mérida.  

Estos proyectos no solo elevan la calidad de vida, también representan una inversión segura gracias al valor que aportan sus espacios recreativos. 

 



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